El presente ingresivo de una sociedad primaria basada en el patronazgo de una clase social política sin rival, hace pensar en el feudalismo donde los ciudadanos pasan a categoría de "siervos".
Ellos recibían una humilde vivienda, algunos animales y supuesta protección, sus derechos eran servir a los nobles, y la principal obligación pagar los tributos (altos impuestos).
Aquellos "Reverendos Soberanos", el Rey, Duque, Marqués, Conde etc. Recibían el poder de nadie terrenal, sino de Dios.
La "parajoda" es que, "Creemos vivir en una República" y sin embargo, tal como ayer, el poder es mal interpretado y es usado como herramienta de yugo.
Toda esa clase social "iluminada", que se cree ungida y que mea agua bendita, haciendo y deshaciendo según su conveniencia, no entienden , no tienen en cuenta que si están allí es para el bien común y que deben gobernar escuchando al ciudadano.
Y por supuesto, olvidaba de destacar, que hoy también ese linaje se respeta, se transfiere los títulos (en este caso léase cargos) de marido a mujer, de padres a hijos y así sucesivamente, todo queda en familia.
Hay que aclarar que el siervo tenía un seudo estado de libertad, igual que hoy (salvando las distancias).
El pasado vuelve, muchos dicen que fue mejor, la verdad no se puede ser tan inconscientes, de pretender repetirlo, en vez de aprender, revisar y no generar la barbarie, solo esto bastaría para crecer y avanzar hacia una humanidad en amor y paz..
Lelu
leluacosta@yahoo.com.ar
Ellos recibían una humilde vivienda, algunos animales y supuesta protección, sus derechos eran servir a los nobles, y la principal obligación pagar los tributos (altos impuestos).
Aquellos "Reverendos Soberanos", el Rey, Duque, Marqués, Conde etc. Recibían el poder de nadie terrenal, sino de Dios.
La "parajoda" es que, "Creemos vivir en una República" y sin embargo, tal como ayer, el poder es mal interpretado y es usado como herramienta de yugo.
Toda esa clase social "iluminada", que se cree ungida y que mea agua bendita, haciendo y deshaciendo según su conveniencia, no entienden , no tienen en cuenta que si están allí es para el bien común y que deben gobernar escuchando al ciudadano.
Y por supuesto, olvidaba de destacar, que hoy también ese linaje se respeta, se transfiere los títulos (en este caso léase cargos) de marido a mujer, de padres a hijos y así sucesivamente, todo queda en familia.
Hay que aclarar que el siervo tenía un seudo estado de libertad, igual que hoy (salvando las distancias).
El pasado vuelve, muchos dicen que fue mejor, la verdad no se puede ser tan inconscientes, de pretender repetirlo, en vez de aprender, revisar y no generar la barbarie, solo esto bastaría para crecer y avanzar hacia una humanidad en amor y paz..
Lelu
leluacosta@yahoo.com.ar
Publicada en la antorcha, Noviembre 2006
No hay comentarios:
Publicar un comentario