miércoles, 1 de septiembre de 2010

Una mirada reflexiva sobre la seguridad ciudadana


La seguridad ciudadana será posible con inclusión social y una decidida lucha contra la corrupción.


El diputado por la provincia de Buenos Aires Yoty Flores participó el viernes último, de un Encuentro de la Red de Mujeres por la Seguridad Ciudadana que tuvo lugar en el Salón Dorado de la Legislatura Porteña. En el marco del panel que trató sobre el ROL DE LA SOCIEDAD Y DE LAS ORGANIZACIONES COMUNITARIAS EN LA CONSTRUCCIÓN DE CIUDADES SEGURAS el diputado de la Coalición Cívica Toty Flores destacó que esto sólo será posible en la medida que logremos desmantelar la red paraestatal de corrupción que nos atraviesa.


Dijo: “La inseguridad debe ser desmantelada con inclusión social, trabajo que dignifique, educación que traiga progreso y salud pública, real, para todos y todas.”


Más adelante agrego: “La corrupción estructural que encarnan las policías provinciales, los proxenetas, los narcos, los capitalistas de juego clandestino y la justicia inoperante. Esto sólo puede existir con la connivencia política, porque la política se financia con estos negocios. Mientras los argentinos no entendamos este proceso oscuro de dominación y sometimiento a nuestros jóvenes, mientras no entendamos que estas asociaciones reclutan por medio de la amenaza y la provisión de droga, a nuestros pibes para que roben para ellos, no podremos participar activamente en la construcción de una sociedad segura. Sólo cuando los pibes muertos sean vistos como víctimas de esto que hoy digo podremos hablar de comunidades seguras”.


Y finalmente, el diputado Flores destacó que: “Resulta ofensivo, hipócrita para los que convivimos diariamente con esa realidad, ver como se culpabiliza solamente a estos chicos que son casi siempre, el último eslabón de la cadena perversa. El eslabón más golpeado, abandonado de un estado que se fue hace un tiempo. Que no aparece con educación, no aparece con salud, no aparece con políticas inclusivas e integradoras. Un claro ejemplo de esto es que las cárceles están llenas de jóvenes pobres cada vez más condenados a la marginalidad”.


Buenos Aires, 28 de agosto 2010